El vapor es desde hace mucho el medio energético de elección para procesos en la industria y servicios auxiliares por muy buenas razones. Si su proceso involucra esterilización, humidificación y el control de temperatura preciso, entonces el vapor es el método más eficiente disponible para la transferencia de energía, incluso si se consumen cantidades relativamente pequeñas. Por ejemplo, los hospitales requieren principalmente agua caliente para calefacción, pero también requieren vapor para esterilización.
En este caso, el vapor ofrece ambas opciones y se sorprenderá al ver la eficiencia con la que se pueden crear ambos. Un sistema de vapor moderno, bien diseñado y mantenido ofrece alta eficiencia operativa y bajos costos de operación para sus necesidades de procesos con un muy atractivo retorno de la inversión.